domingo, 29 de septiembre de 2013

Otros expertos y otro documento sobre pensiones

Juan Fco. Martín Seco
República.com
 
Las comisiones de expertos generan siempre el mismo interrogante. ¿Los expertos son nombrados por ser expertos o son expertos porque son nombrados para la comisión? De cualquier modo, este tipo de comisiones en el momento de constituirse tienen ya redactadas las conclusiones y se crean tan solo para otorgar autoridad técnica a lo que son simples intereses, bien sean políticos o económicos. El Gobierno, sin duda, a la hora de establecer la comisión de expertos para la reforma de las pensiones, tenía decidido ya lo que quería hacer y seleccionó a los componentes de acuerdo con el resultado a obtener. El grupo de “sabios” que ha elaborado la propuesta solicitada por el Gobierno se formó con una composición claramente sesgada y poco independiente. La inmensa mayoría de ellos ha tenido o tiene una evidente vinculación con entidades financieras o con compañías de seguros, principales beneficiarias de un eventual incremento en la suscripción de planes y fondos de pensiones como consecuencia del deterioro del sistema público.
 
Es por ello por lo que un grupo (veinticuatro) de economistas, profesionales y académicos de distintas procedencias y sensibilidades, quizá no más expertos que los gubernamentales, pero tampoco menos, nos hemos sentido en la obligación de elaborar un documento con el que denunciar los sofismas y falacias sobre el que está asentado el discurso de la inviabilidad del sistema público de pensiones y sobre la reforma que va a emprender el Gobierno.
 
Creemos que resulta difícil hablar de inviabilidad cuando en España el gasto en pensiones es reducido si lo comparamos con el de la mayoría de los países de nuestro entorno. Destinamos a ello el 10% del PIB, mientras que la media de la Eurozona tiene un gasto del 12,2%. Según admite la Comisión Europea en su informe The 2012 Ageing Report, el máximo de gasto en pensiones se alcanzaría en España en 2050 y sería del 14% del PIB. Es decir, tendríamos entonces que destinar a las pensiones públicas lo mismo que hoy gastan sin demasiadas complicaciones países como Austria, Francia o Italia......
 
 

Aprendiendo de forma sencilla cómo los bancos crean y mueven el dinero (3 de 3)

Eduardo Garzón
Saque de Esquina
 
Éste es el tercer y último post de una serie que trata la temática de la creación de dinero. En el primer post se analizó el dinero legal que crean los bancos centrales. En el segundo post fue el turno del dinero que crean los bancos privados. En este post veremos cuándo los bancos usan dinero legal y cuándo usan dinero bancario.
 
El dinero bancario (las promesas de pago) sólo sirve para realizar transacciones entre cuentas bancarias ubicadas en el mismo banco. Por ejemplo: yo tengo una cuenta en el banco A y quiero hacerle una transferencia de 100 euros a Felipe. Si Felipe tiene una cuenta en el mismo banco entonces lo único que ocurre es que mi cuenta disminuye en 100 euros, y la de Felipe aumenta en 100 euros. Son simples anotaciones bancarias que no requieren ningún uso de dinero legal. Números que suben y bajan, nada más. La promesa de pago que yo tenía en mi poder ha pasado a manos de Felipe. El banco A simplemente ha pasado de deberme a mí 100 euros (de dinero legal) a debérselos a Felipe. No ha tenido que utilizar dinero legal porque nadie le ha pedido que cumpla su promesa de pago. La promesa de pago sigue viva, aunque en otras manos.
Sin embargo, si la cuenta bancaria de Felipe no estuviese en mi banco sino en el banco B, la operación sería diferente. El banco B no quiere tener en su poder la promesa de pago del banco A, así que le obliga a cumplir su palabra y entregar dinero legal por valor de 100 euros. De esta forma, el banco A paga 100 euros de dinero legal al banco B. Mi cuenta se reduce en 100 euros y la de Felipe aumenta en 100 euros. El banco A ha perdido 100 euros de dinero legal, pero ya no me debe 100 euros a mí porque la promesa se ha extinguido. En cambio, el banco B ha visto aumentar su dinero legal en 100 euros, pero ahora automáticamente tiene reconocida una promesa de pago por valor de 100 euros a Felipe.....
 

jueves, 26 de septiembre de 2013

¿ Puede el comercio ser libre y justo a la vez ?

Susan George
Prólogo del informe “El Comercio Justo en España 2012. Alianzas en movimiento, editado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo.

¿Cuál es la diferencia entre el libre comercio y el Comercio Justo? Se nos suele decir constantemente que el libre comercio es bueno para todo el mundo, que contribuye al crecimiento económico y que crea empleo. Esto puede que fuese cierto en el siglo XVIII, pero hoy vivimos en un mundo completamente diferente y lo que entendemos por “libre comercio” se parece poco a lo que el término pretende insinuar.
 
Tras más de una década de negociaciones infructuosas en el marco dela Organización Mundial del Comercio (OMC), hoy ya nadie duda del fracaso dela Ronda de Doha. Y sin embargo, este fracaso no ha hecho más que estimular el impulso de una mayor liberalización comercial. A comienzos de 2013 unos 550 acuerdos comerciales bilaterales y regionales ya se habían firmado o estaban en proceso de negociación, sin contar los 350 en vigor desde años atrás.
 
Estos acuerdos suelen denominarse “OMC Plus” dado que van mucho más allá de la normativa dela OMC y se adaptan a las necesidades de las empresas transnacionales. Los países empobrecidos objeto de estos acuerdos, con capacidades de negociación infinitamente menores que las grandes potencias comerciales, no siempre son conscientes de lo que implica su firma. En ocasiones sus propios gobernantes encargados de las negociaciones están corrompidos por intereses privados ajenos a las demandas de la mayoría de la población, aceptando acuerdos perjudiciales para estas.....
 


El cientificismo

Juan Pedro Viñuela Rodríguez
Rebelión
 
Estoy explicando a mis alumnos el momento en el que surgen las ciencias y se desplaza a la filosofía declarándose incluso su muerte o desaparición. A la par un debate en las redes sociales sobre la ciencia en la que una amiga señalaba el carácter dogmático de la ciencia y la identificaba con la religión a la que la propia ciencia pretendía criticar me ha llevado, de nuevo, a reflexionar sobre el cientificismo. Pues bien, esta corriente de pensamiento, que pretende ser filosófica y, declarar, a la vez, que la filosofía ha cumplido su cometido y debe desaparecer y que cualquier otro discurso sobre la realidad no tiene sentido y que declara la primacía absoluta de la ciencia, no es ni ciencia, ni filosofía. Es una creencia ideológica infundada. Una creencia que se transforma en religión secular en manos del poder. 
 
Y, curiosamente, el positivismo científico del XIX y el neopositivismo lógico del XX, que son los que han defendido esta posición se nos han colado en la política actual. Y esto es importante porque contamos con un discurso ideológico, de carácter religioso, aunque secular, que seduce al ciudadano y lo deja sin capacidad de pensar ni de ejercer la crítica. Se convierte, como todo dogmatismo, en una forma de control por parte del poder. Y es curioso que, el neopositivismo, aun pareciendo que estaba muerto y enterrado, el que le dio la estocada fue Popper y el que lo enterró fue Kuhn, pues está vivito y coleando. Lo que ocurre es que no aparece con este nombre. La religión de la ciencia, o la tecnofilia, o el digitalismo que dicen algunos, han abarcado todos los ámbitos de nuestra vida, porque ya no hablamos de ciencia, sino de tecnociencia, e inunda todas nuestras actividades.......

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Estado de Bienestar Basura

José Antonio Nieto
EconoNuestra. Público.es
Hemos pasado de rozar el Estado de Bienestar (EB) a tener un Estado de Bienestar Basura (EBB). El ciclo se cerrará cuando haya, simplemente, un Estado Basura (EB, también: pero olvidemos las siglas, para evitar equívocos y no darle ideas al Diablo).

Cuando estudiaba prefería los mensajes contundentes: el Estado cumple una doble función de acumulación y legitimación. Aunque también me gustaban las trilogías: el Estado contribuye a mejorar la estabilidad, la asignación de recursos y la redistribución de la renta. Pronto me di cuenta de que las cosas no son tan simples: el Estado ejerce la violencia legal (apropiándose de una parte de nuestros ingresos, privando de libertad a algunas personas, declarando la guerra…), pero lo hace por el bien de todos (mantener el orden, estimular la eficiencia, favorecer la equidad…).

El asunto se complicó cuando constaté que algunos Estados habían compaginado con éxito sus funciones de acumulación y legitimación. Curiosamente, eran los de mayor nivel de desarrollo, además de contar con más legitimidad democrática y ejercer una más amplia regulación sobre sus sistemas económicos y sociales. Por extrapolación, pensé que el tamaño del Estado sí importa. Al menos en términos de bienestar, puesto que en esos casos se había logrado un equilibrio satisfactorio entre eficiencia y equidad.....

El mejor sistema económico posible

Juan Fco Martín Seco
República.com
 
Es sabido que Leibniz mantenía en su Teodicea una tesis muy sui géneris: Dios ha creado el mejor mundo de todos los posibles, todas las cosas tienen su justificación, su causa suficiente y todo mal posee su razón de ser al estar ordenado a conseguir un bien superior. Tal vez se encuentre aquí la explicación de que Franco tras el atentado del presidente Carrero Blanco pronunciase aquella frase aparentemente tan enigmática: “No hay mal que por bien no venga”.
 
Voltaire no participaba de una visión tan optimista y no dudó en ridiculizarla con una novela, “Cándido”. No solo el protagonista, cuyo nombre sirve de título a la obra, sino también el resto de sus personajes sufren toda clase de desgracias. No obstante, todas ellas no consiguen que el preceptor de Cándido, Pangloss (personificación de Leibniz), cambie un ápice su tesis de que vivimos en el mejor de los mundos posibles.
 
Hoy abundan también los pangloss que nos repiten por doquier que contamos con el mejor sistema económico posible; que la globalización maximiza las riquezas y el crecimiento económico y que la Unión Europea y Monetaria constituye la mejor opción para las economías europeas. Bien es verdad que esta visión idílica choca día a día con la realidad personal de cada uno, pero, ya se sabe, esos males particulares son simples elementos necesarios para el bien general.
  
Los cándidos del siglo XXI contemplan el fin de la estabilidad en el empleo y se ven obligados a olvidar la seguridad con que contaban sus padres de mantener el puesto de trabajo. La indemnización por despido desaparece y los empresarios pueden rescindir los contratos laborales sin apenas coste.....
 

martes, 24 de septiembre de 2013

La desigualdad social

Jaime Richart 
Argenpress.info
 
 En la Naturaleza los seres humanos son desiguales entre sí. La desigualdad natural es la norma. Por eso, antes de afirmar la superioridad de la inteligencia humana sobre la de los demás seres vivos es un imperativo para ella superarla en cuanto sea posible. Esforzarse en estrecharla es el deber por antonomasia de la sociedad en su conjunto y de sus dirigentes económicos y sociales...

Sin embargo, existen dos tipos de individuos, dos clases de grupos humanos, dos fuerzas sociales políticas, dos mentalidades; dos pensamientos (si es que el de los segundos no es, justo, la negación del pensamiento mismo): el de los que efectivamente se esfuerzan en ello (la verdadera inteligencia), y el de los que se esfuerzan en lo contrario, en agrandar la desigualdad. Pues bien, por una maldición biológica, los que se imponen son los de la segunda clase...

Como en otras materias trascendentes en la vida del ser humano sea entendido como individuo aislado o como miembro de una familia zoológica, las razones profundas por las que aquellos actúan en contra del interés de la mayoría, no están claras, si bien se pueden buscar en las distintas fuentes del conocimiento convencional.

Pero la Razón no es prolija. Por eso, prescindamos de lo accesorio y concretemos la principal: la causa está, simplemente, en la necedad superlativa. La necedad superlativa es la de quien busca exclusivamente el bien propio causando terribles estragos al resto de la sociedad y a la naturaleza. La necedad superlativa es la de quien acaba sumido en el tedio o viviendo temeroso de las consecuencias de su egoísmo extremo.....
 

lunes, 23 de septiembre de 2013

Cuando el libre comercio es mentira

Xavier Caño Tamayo
CCS (Centro de Colaboraciones Solidarias)
 
¿Cómo suena que una multinacional tabaquera demande a dos estados soberanos porque la obligan a poner en las cajetillas que el tabaco es malo? ¿O que una petrolera demande a una república porque un tribunal de la misma la condenó a limpiar todo lo tóxico que vertió en la Amazonia durante años? Ha ocurrido. Las demandantes son Philips Morris y Chevron; los demandados, Uruguay y Ecuador.
 
¿Y qué pensar de un estado soberano al que no dejan establecer un control de capitales? Es Chile, que no puede controlar los capitales por prohibírselo el acuerdo comercial con Estados Unidos, que ha firmado acuerdos comerciales bilaterales con catorce países y actualmente negocia otros más con países del Pacífico. Con la Unión Europea negocia un Acuerdo Transatlántico sobre Comercio e Inversiones, el mayor acuerdo comercial de la historia. En aras del libre comercio, dicen. Pero, al igual que en la negociación del Pacífico, Estados Unidos ha impuesto el secreto de las negociaciones.
 
El tratado de libre comercio de Estados Unidos más conocido es el firmado con México. Teórica solución de problemas de México, como recuerda Vicenç Navarro, la realidad fue otra. Se destruyeron empleos en México y Estados Unidos y benefició de verdad a grandes empresas de ambos lados, en perjuicio de la clase trabajadora. Y así en todos los países que han firmado tratados.
 
 Desde hace décadas, los países ricos ya no ocupan militarmente los mal llamados países en desarrollo para colonizarlos. La ocupación militar colonizadora se ha sustituido por tratados comerciales bilaterales. Mano de santo. Aunque quien más tratados haya firmado, Estados Unidos, a veces invada militarmente.....
 
 

La fase actual

Juan Ramón Capella
Mientras Tanto

La larga fase de expansión capitalista que terminó en 2008 consistió esencialmente en la formación de un gran ejército industrial multinacional de mano de obra barata. 

El capital se deslocalizó hacia lugares donde podía encontrarla. La oleada transformadora de la tercera revolución industrial, la de la informática, además, coadyuvó en su éxito. De este modo se restablecía la tasa de ganancia del capital, venida abajo en los años setenta.

La financiación de aquel movimiento de transformación y reubicación del capital, de creación de un nuevo ejército industrial fuera de las metrópolis centrales del capitalismo, se hizo a base del crédito, del endeudamiento. De los estados y de las empresas. Nunca hubo tanto crédito. El período se cerró en 2008 cuando el sistema financiero se desmoronó por causa de una de las crisis cíclicas del capitalismo, de sobreproducción. Nadie tenía con qué pagar el exceso de producción. Ni para pagar, claro es, los créditos.

Ante la crisis, el gran capital impuso a los gobiernos, ante todo, socializar la deuda de un sistema financiero en quiebra. Tanto en Europa como en Norteamérica, que con Japón fueron los principales centros amenazados, las arcas públicas fueron vaciadas para el salvamento del sistema financiero privado, aprovechándose también para malbaratar en el mercado bienes públicos. Todo ello no para que volviera a crearse el crédito —la confianza se había desvanecido— sino para que fueran los ciudadanos quienes pagaran la deuda financiera a los acreedores......

domingo, 22 de septiembre de 2013

Aprendiendo de forma sencilla cómo los bancos crean y mueven el dinero (2 de 3)

Eduardo Garzón
Saque de Esquina
 
En el primer post de esta pequeña explicación de cómo los bancos crean y mueven el dinero explicamos qué es y quién se encarga de crear el dinero legal. En este segundo post nos detendremos en la naturaleza y características del dinero que crean los bancos.
 
El dinero bancario no es dinero en sentido estricto (el banco central no le reconoce validez). El dinero bancario son simplemente promesas realizadas por el banco que crea ese dinero. Son promesas de pago, y por eso se pueden utilizar para realizar transferencias (comprar cosas, efectuar pagos, realizar inversiones…). Vamos a explicarlo con más detenimiento utilizando un ejemplo.
 
Yo puedo escribir en un papel: “me comprometo a pagar 1.000 euros al poseedor de este papel” y ésta es la promesa que estoy materializando en un formato físico. Si yo quiero comprarle a Isabel un mueble que cuesta 1.000 euros, en vez de entregarle billetes o en vez de hacerle una transferencia bancaria, puedo entregarle mi promesa de pago (el papel). Esto sólo tendría sentido si Isabel se fiara de mi palabra y confiara en que en un futuro le pagaré esos 1.000 euros (pero esta vez con dinero legal, no con mi promesa). Si Isabel confía en mi palabra, yo habré comprado un mueble sin utilizar dinero legal respaldado por el banco central. El proceso podría continuar: Isabel podría comprarle a Simón un portátil entregándole la promesa de pago que yo hice (el papel). Si Simón confiara en mi palabra y aceptase el papel, se habría producido otra venta sin necesidad de utilizar dinero legal respaldado por el banco central. Esta sucesión de compras y ventas podría continuar indefinidamente, siempre que aquellos que utilizaran mi papel confiasen en mi palabra.......
 
 

sábado, 21 de septiembre de 2013

¿Quién nos alimentará?

Silvia Ribeiro.
La Jornada 
 
El tema del hambre y las necesidades alimentarias frente a la creciente población mundial es crucial, pero está atravesado de supuestos equivocados que urge terminar.
 
Casi todos los gobiernos y la comunidad internacional que se ocupa del tema alimentario parten de la premisa que necesitamos la cadena industrial y sus tecnologías para alimentarnos, tanto en el presente como para enfrentar los desafíos futuros. Los campesinos y otros pequeños productores de alimentos son vistos como algo casi folclórico: existen, pero son marginales y no juegan un papel importante en la alimentación. Es también la consigna de transnacionales y científicos que son financiadas por ellas: sin semillas industriales y transgénicas, sin monocultivos industriales, maquinarias y gran cantidad de insumos y agrotóxicos, el mundo pasará aún más hambre ante el aumento de población y el caos climático.
 
Sin embargo, los datos duros muestran una realidad inversa: es justamente la cadena industrial, las trasnacionales y sus tecnologías, las que exacerban las crisis y producen más hambre, mientras que las redes campesinas y otros pequeños son quienes alimentan a la mayoría.......
 
 

Aprendiendo de forma sencilla cómo los bancos crean y mueven el dinero (1 de 3)

Eduardo Garzón
Saque de Esquina
 
En un artículo anterior hablé de cómo los bancos privados pueden crear dinero bancario a partir del dinero legal que crean los bancos centrales. Puesto que fue un artículo meramente introductorio simplifiqué algunas cosas al mismo tiempo que me dejé determinados cabos sin atar (y varios lectores lo hicieron notar en los comentarios). Con la intención de resolver las dudas que se originaron voy a profundizar en el tema yendo incluso más allá de lo resaltado por los lectores de forma que pueda ser útil para todo aquel que esté interesado en el asunto de la creación de dinero. Como hay bastante contenido voy a dividirlo en tres posts: en el primero explicaré la creación de dinero legal por parte del banco central, en el segundo me detendré en la creación de dinero bancario por parte de los bancos, y en el tercero explicaré qué tipo de dinero es utilizado por los bancos en cada una de sus transacciones. Suele ser un tema engorroso pero trataré de hacerlo sencillo sin perder por ello ni una pizca de rigor. A los que se animen a zambullirse en esta interesante temática les adelanto que terminarán sabiendo y comprendiendo cosas que suelen desconocerse o malinterpretarse (incluso por reconocidos economistas).
 
Los bancos centrales crean dinero legal; son los únicos que tienen autoridad para originar de la nada aquello que tiene validez para realizar transacciones de todo tipo (comprar productos y servicios, hacer inversiones, realizar pagos pendientes, etc). Absolutamente nadie más puede crear dinero legal. Yo, por ejemplo, podría crear dinero inventándome un material y un diseño, pero nadie me lo aceptaría como medio de pago, al igual que ningún vendedor aceptaría billetes del juego “Monopoly” a cambio de entregar su producto. El dinero legal sirve porque todos los integrantes de una sociedad lo aceptamos como medio de pago. Sabemos que con ese dinero en nuestras manos podremos realizar transacciones porque el resto de personas confía en su validez. Y si confiamos en la validez de este dinero legal es porque como sociedad le hemos reconocido a una institución oficial (que se llama “banco central”) el poder de crear el dinero.......
 
 

En defensa del sistema público de pensiones. Documento

documentopensiones.org

Los economistas y juristas firmantes de este Documento lo han elaborado con objeto de rebatir y desautorizar el Informe de la Comisión de expertos designada por el gobierno y para denunciar la nueva contrarreforma de las pensiones que con base en él pretende acometer  el PP. Los ciudadanos deben saber que reducir las pensiones no es un medida que sirva para combatir la crisis económica sino que implica un paso en el desmantelamiento del estado social que se está llevando a cabo.

En defensa del sistema público de pensiones

  LA SOSTENIBILIDAD DE LAS PENSIONES, PROBLEMA POLÍTICO, NO ECONÓMICO.

Pensamos que la manera de plantear un problema condiciona su solución. La sostenibilidad del sistema público de pensiones se ha planteado siempre, en unos casos por ignorancia y en otros por intereses espurios, de la peor forma posible. Se ha tratado  como un problema técnico cuando es un problema político. Se ha querido enmarcar como una cuestión de insuficiencia de medios, cuando en realidad el quid de la cuestión es la distribución de la renta. Se pretende que creamos que la sostenibilidad del sistema público de pensiones depende de “cuántos son los que producen”, cuando la variable importante es “cuánto se produce”.

Conscientes de que se trata de un problema político y no económico, consideramos que nuestro papel debe centrarse únicamente en desenmascarar los intentos de justificar mediante planteamientos aparentemente técnicos las posturas ideológicas previamente tomadas.

         Hace ya muchos años que todos los servicios de estudios de las entidades financieras y similares, apoyados y jaleados por los organismos internacionales, comenzaron a emitir informes acerca de la inviabilidad del sistema público de pensiones. La postura oscilaba desde los más radicales, demandando su sustitución por planes privados, hasta los medianamente posibilistas, que tan solo pretendían su reforma, de manera que los gastos sociales no se incrementaran e incluso se redujeran. Por citar tan solo un ejemplo, allá por 1993 la Fundación BBV contrató a treinta y cuatro sabios, expertos, técnicos para que estudiasen el tema de las pensiones......