Xavier Caño Tamayo
CCS (Centro de Colaboraciones Solidarias)
Noticias de un día cualquiera. El partido del gobierno en España
rechaza el Impuesto a Transacciones Financieras; impone una ley de
régimen local que suprime servicios municipales imprescindibles para
millones de ciudadanos. La ministra de Sanidad contrata a un corrupto
imputado para implantar la gestión privada en hospitales del ministerio.
Privatizan el agua. Las 35 mayores empresas de España pagan 500
millones de euros menos en impuestos aunque el año anterior ganaron más.
El Gobierno aprueba un regalo de 30.000 millones a la banca. El
Gobierno justifica que los bancos no den crédito, porque han de velar
por la solvencia de sus clientes. Los pensionistas perderán 33.000
millones en 8 años. Más vueltas de tuerca en la aplicación de la reforma
laboral. El FMI amenaza con más “ajustes significativos” para reducir
la deuda… Sin olvidar la reducción presupuestaria, los recortes en
educación, el aumento del paro, de la precariedad, la pobreza y la
desigualdad… El remate es la nueva ley de seguridad ciudadana. Muchas
protestas sociales serán tratadas como delitos.
Louis Brandeis, juez de la Corte Suprema de Estados Unidos, lo dejó muy claro: “Podemos
tener democracia o riqueza concentrada en pocas manos, pero ambas cosas
no”. Banca, corporaciones, grandes fortunas y Gobierno han elegido la
riqueza para la minoría. Para ellos. Lo logran saqueando a la
ciudadanía. Y con represión para impedir la respuesta cívica, la acción
de los trabajadores. Por eso las concentraciones frente al Congreso,
los escraches junto a viviendas de políticos o grabar y difundir
imágenes de policías en acción serán castigados con multas de hasta
600.000 euros. Y con penas de prisión de hasta cuatro años.
Sorprendente, porque según Gonzalo Moliner, presidente del Tribunal
Supremo, los escraches son “un ejemplo de libertad de manifestación”.
Pero a esta gente no les importan las libertades: son obstáculos a
derribar......