Andy
Robinson.
La Vanguardia.com
Los ejecutivos, banqueros y emprendedores
intelectuales reunidos en el Foro Económico Mundial quieren romper con la
imagen de ricos ociosos y sin escrúpulos y se ven como "meritócratas
trabajadores" | Nadie se da por aludido cuando sale el tema de la evasión
fiscal por parte de ricos y grandes empresas | Jamie Dimon, de JP Morgan, ha
criticado a los gobiernos por montar una 'vendetta' contra la banca.
La
calle Promenade, en el centro del pueblo alpino de Davos, se ha convertido en
una especie de strip mall de los que se ven en las afueras de las ciudades
estadounidenses, abigarrado de patrocinios corporativos -RSBC, BlackBerry,
Microsoft...-, escaparates con marcas globales y atascados de limusinas. En el
lujoso hotel Belvedere, un enorme cartel anuncia la llegada de otro mercado
fronterizo a las estrategias de inversión de los fondos globales:
"Azerbaiyán: la tierra del futuro". Se ha abierto una cafetería
Pepsico, que se llena de participantes tecleando en sus iPads.
Klaus
Schwab, el rígido y algo anticuado empresario suizo que fundó el Foro Económico
Mundial (WEF) en este pueblo en 1971 con el fin de inculcar la ciencia de la
gestión empresarial estadounidense en los mánagers europeos, no está muy de
acuerdo con tanta presencia corporativa en Promenade según se entiende. Pero
los 2.500 ejecutivos, banqueros y emprendedores intelectuales reunidos en Davos
este año -entre ellos 70 billonarios (con mil millones de dólares o más)-
parecen querer ser tipos normales que llevan bambas New Balance y beben Pepsi
mientras hablan de killer apps.....
No hay comentarios:
Publicar un comentario