miércoles, 15 de febrero de 2012

Sanidad Pública: "Sálvese quien pueda"

Fernando Lamata
Público
Aunque la sanidad pública española es considerada una de las mejores del mundo, con un coste menor que los países de nuestro entorno y mejores resultados en salud, se plantea con frecuencia la necesidad de más copagos para contribuir a la financiación y frenar la demanda. Es esta una modificación de calado que afecta y pone en riesgo los fundamentos de nuestro modelo sanitario.

El copago (que debemos llamar repago, ya que todos pagamos impuestos para sostener la sanidad pública), es decir, el pago de una parte de la prestación por el paciente en el momento de utilizar un servicio sanitario, responde conceptualmente a un modelo privado de atención: que cada uno cuando esté enfermo se pague lo suyo. Sin embargo, la sanidad pública se desarrolla al comprobar que la mayoría de las personas de clase media y los trabajadores, con rentas medias y bajas, no podrían pagarse la atención médica, incluso se arruinarían (como pasa con frecuencia en EEUU), si tuvieran una enfermedad grave o una enfermedad crónica.

Uno no elige cuándo se pone enfermo, ni tampoco elige la gravedad de su enfermedad. Uno puede elegir ir al cine o al fútbol, o no ir. O puede, si tiene dinero, decidir gastarse 30 euros o 300 en un vestido. Pero uno no decide cuándo tener cataratas. Como tampoco elige tener cáncer de colon, cuyo tratamiento es muy caro, en vez de tener un catarro.....

No hay comentarios: